Pasando por Platón, Hegel, Marx, Mussolini, Mao, Stalin, Lenin, Pol Pot y ahora nuestros queridos Castro, Correa, Chavez y Ahmadinejad. Todos se creían o se creen la mamá de Tarzan dicho en términos criollos. Por eso no es extraño que se eternicen en el poder. Las dos visiones de ver el mundo la una es la utópica que agrupa al nazismo, socialismo y fascismo son engendros del mismo padre; el colectivismo y su visión constructivista del mundo; es decir la planificación central de la economía y de la política (moral).
Estos creen que el "pueblo" es una masa de ignorantes que no se mueven sin el Estado. Por eso quieren controlarlo todo mediante leyes que deciden que grupos de ciudadanos ganan y cuales pierden
El Estado mediante la coacción busca convertir el pueblo en un rebaño uniforme donde todos piense igual y donde todos tengan lo mismo salvo sus allegados que pueden tener mucho mas. Conocemos de memoria sus resultados. El odio, la intolerancia, el autoritarismo. Estos ungidos se llenan la boca hablando de paz, democracia, igualdad.
Estos creen que el "pueblo" es una masa de ignorantes que no se mueven sin el Estado. Por eso quieren controlarlo todo mediante leyes que deciden que grupos de ciudadanos ganan y cuales pierden
El Estado mediante la coacción busca convertir el pueblo en un rebaño uniforme donde todos piense igual y donde todos tengan lo mismo salvo sus allegados que pueden tener mucho mas. Conocemos de memoria sus resultados. El odio, la intolerancia, el autoritarismo. Estos ungidos se llenan la boca hablando de paz, democracia, igualdad.
En la otra esquina esta el liberalismo que destaca la libertad individualidad y de empresa. Basado en una visión espontánea del mundo, apegado a la realidad y no a la fantasía de un mundo ideal liderado por un gran líder. No necesita de un pastor que guíe de rebaño y nos convierta en el famoso hombre nuevo y que nos diga que hacer, pensar, oír o leer. Por eso el liberalismo cree en el principio del Estado limitado donde se defienda únicamente los derechos básicos que son la propiedad privada, la libertad y la vida. Creen en el libre mercado pues tanto el consumidor como el proveedor salen ganando de un transacción comercial o sino el trato simplemente no se lo realizaría.
En el medio del camino entre estas dos formas de ver el mundo tenemos a la socialdemocracia europea, las dictaduras "neoliberales" (Pinochet), la izquierda vegetariana como en Chile (Bachelet), gracias a Dios, no practicante por algo tiene éxito. Brasil (Lula Da Silva); los conservadores y cualquier otra mezcla en distintos grados de liberalismo con colectivismo.
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