La progresía ecuatoriana y especialmente la guayaquileña andaba ayer de fiesta, nada más y nada menos que el Gobierno de la Revolución Ciudadana ofrecía un concierto gratuito del recadero más famoso de la dictadura castrista: Silvio Rodríguez.
La progresía en su incoherencia se las da para admirar a la revolución, que entre sus logros actuales cuenta con una aguda escasez de papel higiénico. Si yo sé debe ser parte de un complot sionista e imperialista para desestabilizar al régimen, además como molestarse por pedazos de papel cuando "salud y educación" no faltan al pueblo cubano.
Al ser un mimado del régimen comunista al señor Rodríguez de seguro no le hará falta el papel higiénico a su regreso a su "país libre". Mientras que al cubano promedio no le queda más que empezar a acabar con la biblioteca de la casa, ojala empiecen por los ejemplares del Granma.
